Rostro cansado tras un largo viaje y dos jornadas de compromisos en Madrid y Barcelona aterrizó en Son Sant Joan el nuevo campeón del mundo de Izan Guevara recibió al fin el abrazo de su madre, Marga, su hermano Aitor y sus compañeros en el día a día, entre ellos los pilotos del CTEIB.
En el capítulo de agradecimientos, tiene claro Izan que «en primer lugar va mi familia, porque sin ellos no estaría aquí. Después, el equipo por todo lo que hemos evolucionado, y tras ellos mis amigos y mi gente, todos los que me han ayudado a llegar a este punto a lo largo de mi carrera, proseguía el 28, quien preguntado por la cantidad de éxitos del motociclismo mallorquín, le pone un toque de humor: Hago la broma de la sobrasada, las Quelitas…
Ahora, Moto2 es el reto y el objetivo de Izan y su equipo, una categoría a la que llega «para aprender», pensando en ser ‘Rookie del Año’ . Una categoría «difícil» y en la que podrá ir más rápido, intentando marcar más las diferencias.
No fue fácil el arranque de la temporada para Guevara, fue un poco caótico. Penalizaciones, averías, abandonos , en Catar me sancionaron, en Argentina rompimos el motor, en Austin don Long Laps, fue difícil, pero lo que cuenta es el final y ha sido feliz
Izan Guevara agradece especialmente a su mecánico de toda la vida, Pedro Ribas, sin dejar de lado y en primer lugar a su familia, entrenadores, Federación Balear y CTEIB, claves para compaginar estudios y competición , a Pedro (Ribas) le debo muchísimo, porque llevo con él desde los 8 años. Me lleva y repara las motos aquí y hemos pasado muchas cosas junto a Dani Vadillo o Ángel Poyatos,
