V. GAYÀ CÓRDOBA ­Balears presume de tener la cuarta mejor selección cadete masculina de España. El combinado isleño no pudo alcanzar la medalla de bronce, que hubiera puesto el broche de oro –la final hoy por hoy está inalcanzable– a su histórica hazaña, tras perder ayer la final de consolación frente a la potente selección del País Vasco por 44-57, en la última jornada del Nacional de combinados base celebrado en Córdoba.
El partido fue muy trabado y se decidió por la mayor envergadura y físico de los vascos. Además, los de Balears no tuvieron nada de acierto en los tiros exteriores. Aún así al descanso se llegó con un esperanzador 24-28 para los vascos. Sin embargo, al igual como ocurrió en la semifinal contra Madrid, que ayer se proclamó campeona al ganar a Cataluña (73-63), el inicio del tercer cuarto fue nefasto ya que se encajó un parcial de 2-15.
De esta manera, Balears se tuvo que conformar con una histórica cuarta plaza que se hubiera firmado antes de empezar la competición. Esta posición confirma la gran hornada del año 1995 que existe en Balears. Los doce que han acudido al Nacional han demostrado que pueden competir y ganar a cualquiera a excepción de Cataluña y Madrid, que están varios peldaños por encima de Balears.
Los que han hecho historia en Córdoba de la mano del técnico Ángel Molinero ayudado por Jordi Toledo son: Marcos Ruiz, Nacho Rodríguez y Paco Hernández (La Salle); Dani Tugores y Jaume Vallès (Sant Josep); Francesc Coll y Marc Fortuny (Alcázar); y Andreu Adrover, Antoni Garcías, Giorgio Pontiggia, Álex Martorell y Joan Barceló (CTEIB).
A esta generación habría que añadir a los menorquines Sergi Llofriu, en el Cajasol, que no jugó con Andalucía al estar lesionado; y a Agustí Sans, del Joventut de Badalona, que no participó con Cataluña al estar con la Española junior; y a David Iriarte, también del Joventut de Badalona, que ayer disputó la final ante Madrid. En esta lista también tendría cabida Marc Bauzá, de 1994, que acaba de aterrizar en el Joventut de Badalona.
«Estamos muy satisfechos. No somos conscientes de lo que se ha hecho, pero estar entre los cuatro mejores es algo histórico», opinó Jaume Estarellas, presidente de la Federación Balear de Baloncesto, que estuvo presente en el Nacional de selecciones base.
«La pobre competición que tenemos –el título de Liga generalmente sólo se lo disputan dos o tres equipos– y el escaso número de fichas en comparación con otras territoriales hace más valiosa esta cuarta plaza. Además, demuestra que hay una gran generación», dijo.
Por otra parte, la cadete femenina quedó en un meritorio séptimo lugar tras ganar ayer a Galicia.

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