Los baleares cumplieron en Londres 2012
Dos medallas de plata, una de bronce y dos diplomas.
Los diez mallorquines y dos menorquines que participaron en los Juegos Olímpicos de Londres cumplieron con creces en la gran cita deportiva del año 2012.
En unos Juegos en los que los focos se centraron en el nadador Michael Phelps por convertirse en el deportista con más de medallas (22) o el mediático atleta Usain Bolt, diez mallorquines y dos menorquines dejaron bien alto pabellón balear en Londres 2012.
Tres podios –dos de plata y uno de bronce– y dos diplomas olímpicos, además de batir registros personales, mostraron de nuevo que el deporte isleño, pese a la crisis y a la notable ausencia por lesión del tenista Rafel Nadal –que además iba a ser el abanderado de la delegación española en la ceremonia de inauguración– está a nivel más que aceptable. De notable.
Brigitte Yagüe fue quien acaparó más atención, a nivel regional, nacional e incluso internacional. Por sus lágrimas al asegurarse la medalla olímpica, por su espectacular combate con remontada que la metía en la final de Londres y porque era el único podio de alto máximo nivel internacional que le quedaba por conquistar. La ‘reina del taekwondo’ cumplió a sus 31 años con su sueño al conseguir una presea de plata que completa su extenso palmarés.
Rudy Fernández, de 27 años, repitió puesto en el podio en la cita inglesa en lo que era su tercera participación olímpica. Fue plata en Pekín y en Londres con la selección española de baloncesto. Era un metal casi asegurado para el deporte nacional, pero los Gasol, Navarro o el menorquín Sergi Llull tuvieron que sudar más de lo previsto para alcanzar la final. Allí, ante la favorita Estados Unidos –que se presentó con su enésimo Dream Team–, tuvieron que claudicar, cerrando los Juegos con la decimoséptima medalla española.
Otro podio asegurado era la natación sincronizada, aunque se aspiraba a la plata. Aun así, el bronce supo a gloria ante el inalcanzable nivel de las rusas y la gran actuación de las chinas. Marga Crespí, a sus 22 años, era una de las ‘veteranas’ de un equipo nacional que sorprendió con sus bañadores, sus gorros y su coreografía. Es la primera nadadora balear –en su caso en sincronizada– en ganar una medalla olímpica.
Rozó tal proeza Sete Benavides, la gran promesa del piragüismo español. En su primeros Juegos, pagó su inexperiencia –19 años– con unas centésimas que le relegaron a la cuarta plaza y a recibir el diploma olímpico. El mismo premio obtuvieron el mallorquín David Muntaner y el menorquín Albert Torres con el equipo español de persecución olímpica de ciclismo en pista, que fue sexto.
En la final se metió Fabián González, que con 19 años lideró al equipo nacional de gimnasia artística. Fue noveno en el concurso general, a muy poca puntuación del diploma.
Casi un castigo por su gran actuación, igual que le ocurrió a Melanie Costa, que a sus 23 años batió cuatro veces sus registros y dos récords de España en los relevos, pero que no le sirvieron para meterse en unas finales que mereció.
El triatleta Mario Mola debutaba a sus 22 años en los Juegos y tuvo una actuación correcta en el triatlón, siendo el segundo mejor española clasificado tras remontar en el sector de ciclismo y alcanzar la decimonovena plaza final.
Algo más se esperaba de la tenista Nuria Llagostera, que cayó tras dos partidos en el doble junto a María José Martínez, aunque lo peor estuvo fuera de la pista, cuando no se apostó por ella –y por eso España ni siquiera tuvo pareja para competir– cuando tenía opciones de luchar por la medalla.
Por último, el atleta David Bustos, esperanza en el 1.500, y que no tuvo un buen debut olímpico al caer en la primera ronda.
Información: M. Fernández/www.diariodemallorca.es

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